Los 8.000 vertederos existentes en España no son inocuos, ni mucho menos, ya que ocasionan un tercio de los gases perniciosos para el ecosistema –28% de gases de efecto invernadero– y además ocupan grandes espacios sin generar siquiera algún tipo de energía o material. Por eso no es extraño que la valorización energética sea uno de los objetivos del borrador del Plan Nacional Integrado de Residuos 2008-2015 (PNIR). En otras palabras, más incineradoras y reducir los desechos que llegan a los vertederos, pero sin dejar de potenciar el reciclaje y la reutilización siguiendo las directrices europeas que obligan a ir cada vez menos a los vertederos y más al tratamiento de residuos.
Sin embargo, pese a que la valorización energética de los Residuos Sólidos Urbanos está muy por debajo de otros países europeos más avanzados medioambientalmente, la incineración cuenta con el rechazo de grupos ecologistas y diversas asociaciones, como se ha puesto de manifiesto en Alcalá con el Ecoparque de la Mancomunidad de Municipios del Este, que incluye una planta de plasma, pese a que sus responsables han reiterado que “no es una incineradora”.
El PSOE de Alcalá no quiso entrar en detalles sobre el borrador del PNIR, en el que se apuesta por elevar un 30% la incineración de basuras, y que implicaría la construcción de más plantas, ya que consideran que lo que hay por ahora es “un borrador de un borrador de un plan”. y “no hay nada concreto.”
Por su parte, el edil socialista Juan Luis Aguirre aclaró que el Ministerio de Medio Ambiente, y Rural y Marino no tiene competencias en residuos y “sólo tiene una competencia de coordinación y de hacer transcribir las directivas europeas”. He hecho, son las comunidades autónomas y los ayuntamientos o mancomunidades los que pueden elegir el emplazamiento o el tipo de tecnología, como sucede con la planta de plasma que se iba a instalar en Alcalá y que según los últimos rumores podrían levantarse en el municipio de Corpa.
Sin embargo, la incineración no convence al PSOE de Alcala y aseguran con contundencia que “el Grupo Municipal Socialista estará en contra de la instalación de una incineradora en el Corredor, sea de quien sea".
Pero con la desaparición de los vertederos las comunidades ya barajan en alternativas a la gestión de residuos en las que la incineración cobra enteros. CC OO, que participa en la elaboración del borrador, señala que el PNIR prevé incrementar la capacidad de incineración de residuos urbanos de 2,1 a 2,7 millones de toneladas al año, lo que según el sindicato obligaría a aumentar el número de plantas incineradoras.
El borrador, tercero que elabora el Ministerio de Medio Ambiente Rural y Marino, apuesta por la incineración de basuras, con un aumento del 30% –unas 600.000 toneladas– hasta 2012 respecto a 2006. No obstante, el texto no detalla ni el número de plantas ni la ubicación.